Cada día que hago un post nuevo para niños de 8 años, siento que, con 25, soy bastante ignorante de asuntos doctos para párvulos.
Las tortugas, por ejemplo.
Tuve dos y murieron (se enterraron para hibernar??). Y luego traté de rescatar una (tartaruga, aunque yo le decía tortuguela) en una avión, en medio de una tormenta eléctrica.
Más allá de eso, la única otra tortuga que ha captado mi atención es Burocracia. (Y una fila de otras tortugas literarias)
NUnca, nunca, nunca, me imaginé esto:

Tortuga: Del latín tardío tartarūchus, demonio, y éste del griego tardío ταρταρoυχoς: habitante del Tártaro o infierno, porque los orientales y los antiguos cristianos consideraban que este animal, que habita en el cieno, personificaba el mal.

¡Santo dios de los quelonios (que vendría a ser hades)!

Sólo me queda decir: